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Una familia denunció este martes el “rapto” de su pariente tras un conflicto de terrenos en la comunidad de El Higüero, próximo a La Cuaba, en Santo Domingo Norte.
Durante una entrevista en el programa El Matutino 91 FM, los familiares del señor Mateo Soriano, un agricultor de 70 años que padece de Alzheimer, expresaron su preocupación y consideran que lo sucedido fue un secuestro por la forma en que se llevaron al señor de su vivienda, sin una orden de arresto ni ofrecer detalles.
El jueves por la mañana, según relató Hilaria Perdomo, presidenta de la junta de vecinos, varios hombres no identificados llegaron al lugar en camionetas sin placa y se llevaron a Mateo Soriano bajo el pretexto de que eran electricistas que iban a resolver una falla eléctrica que tenía la familia en su vivienda, pero cuando el señor salió a mostrarles el área donde se podría encontrar la falla, estos lo apresaron y se lo llevaron sin brindar ninguna información, acción que sus familiares catalogan como un rapto.
Agregan que Soriano, debido a su alzhéimer, no podía comprender la situación.
“La información que ellos dan es que estaban dentro de la casa y, como tenían un problema de electricidad, cuando le tocan la puerta, ellos le dicen que es un electricista. Entonces, cuando él sale a la calle a mostrarle dónde podía estar la falla de electricidad, ahí ellos lo apresan”. Expresó Hilaria.
La situación se agravó cuando, según denuncian, se le imputó un expediente por presunta posesión de drogas, lo que la familia considera una maniobra para justificar la detención.
El conflicto surge por un terreno que Mateo ha ocupado por más de 20 años perteneciente al Consejo Estatal del Azúcar (CEA). Sin embargo, un vecino que adquirió recientemente un solar colindante asegura que, tras una medición con dron, parte del terreno donde reside esta familia le pertenece, lo que generó la disputa.
Luego de este conflicto, la esposa del señor, Josefa Mueses de Soriano, pide ayuda a las autoridades para esclarecer el suceso y dice temer por su vida, tras las amenazas recibidas por parte del vecino que adquirió el terreno que originó el conflicto y por las advertencias de una jueza involucrada en el caso para que desmientan y retiren la denuncia en los medios de comunicación.
“Que se nos asegure la vida, porque una persona, luego que se terminó el juicio de ayer, nos dio una terapia para que nosotros cedamos a tumbar la querella que pusimos ante el caso, y nos exigían que si llamábamos a la prensa y decíamos que todo era mentira, lo soltarían de una vez, dijo una jueza". Expresó Josefa.
La señora Josefa explica que no recuerda el nombre de la jueza, pero que, debido a la persecución recibida para que retire la querella y a la forma en que fue llamada a un despacho de forma intimidante para tal petición, considera que la persona es una jueza.