El exjefe de la Policía y de la Fuerza del Pueblo, Rafael Guillermo Guzmán Fermín, cuestionó en A Diario que no refleja la realidad las estadísticas del Ministerio de Interior y Policía sobre la baja de la criminalidad en el país.
"El Ministerio de Interior y Policía continúa expresando que hay una disminución en la criminalidad; sin embargo, han ocurrido 72 asaltos y atracos, con ocho muertes en los últimos 15 días", acotó.
Precisó que la cifra anterior publicada en la prensa demuestra en los hechos un aumento en la inseguridad ciudadana, a través de asaltos y robos.
Guillermo Guzmán Fermín destacó la diferencia entre la tasa de homicidios y el índice general de criminalidad, indicando que la focalización en solo los homicidios oculta un panorama más amplio de la inseguridad que afecta a la sociedad, contrario a las estadísticas del Ministerio de Interior y Policía.

Guzmán Fermín sostuvo que la estrategia actual de enfrentamiento y violencia, como los 'intercambios de disparos' contra los supuestos delincuentes, no aborda el problema en su esencia y, muchas veces, agrede a los ciudadanos más vulnerables.
Planteó un cambio hacia un enfoque que trate las causas fundamentales de la violencia, en lugar de solo los efectos superficiales, enfatizando la necesidad de analizar problemas socioeconómicos que conducen a la delincuencia.
"El tema de la seguridad e inseguridad es un tema social, no exclusivamente policial", precisó.
Expresó que la seguridad no puede ser abordada únicamente desde el ámbito policial, sino que debe incluir un análisis social que considere factores como el desempleo, la falta de oportunidades y la mala salud pública.
Guzmán Fermín mencionó que se deben implementar políticas públicas integrales que aborden las raíces de la violencia, resaltando que es deber del Estado ofrecer soluciones que mejoren las condiciones de vida de la población.

El exjefe policial, que estuvo como comandante en el Nordeste, San Francisco y San Pedro de Macorís, manifestó que la seguridad debe ser abordada desde una perspectiva integral, bajo la coordinación del Ministerio de Interior y Policía.
"La seguridad pública es un tema relevante y universal, no limitado solo a la República Dominicana; es necesario tener una comprensión amplia desde las ciencias sociales, incluyendo la criminología, la psicología, la sociología, entre otras", expuso.
Adujo que este enfoque interdisciplinario permite estudiar no solo el delito, sino también a quienes lo cometen, el entorno en el que ocurren y el pensamiento de los fiscales y jueces involucrados en el proceso.
Indicó que el mapa de calor es un software que indica dónde y cuándo ocurren los delitos.
Agregó que el mapa de calor proporciona estadísticas valiosas sobre la ubicación y el tipo de delitos, así como sobre las características demográficas de las víctimas y delincuentes.
Especificó que el análisis del mapa de calor reveló un aumento de violaciones y atracos en una zona de Santo Domingo Este, lo cual llevó a la intervención de las autoridades sobre el entorno físico y social de la comunidad.
Dijo que las acciones coordinadas, como mejorar la iluminación y el pavimento en las calles y aumentar el patrullaje, resultaron en la disminución de estos delitos.
Indicó la sinergia entre la Policía Nacional y los gobiernos locales es crucial para abordar los problemas específicos de cada comunidad.
Añadió que la política de seguridad debe ser adaptada a las realidades locales; lo que ocurre en una zona no es necesariamente igual que en otra, lo que demanda un enfoque focalizado en la prevención del delito.
Señaló que es fundamental que los alcaldes asuman una mayor responsabilidad y colaboren directamente con las fuerzas policiales para crear estrategias de seguridad efectivas.