
Los seguidores del expresidente de Bolivia, Evo Morales, preparan más movilizaciones desde este lunes en La Paz para pedir la renuncia del actual mandatario, Luis Arce, y exigir la inscripción de su líder como candidato presidencial para las elecciones generales, a pesar de estar inhabilitado.
Los dirigentes campesinos y de otros sectores leales a Morales anunciaron, además, que a partir del miércoles habrá un bloqueo nacional indefinido de carreteras en protesta por la crisis económica, caracterizada por la continua escasez de dólares y combustible.
“Este lunes continuaremos con nuestras movilizaciones concentradas en la ciudad de La Paz. Nuestra movilización seguirá hasta que el Gobierno de Luis Arce abandone la silla presidencial. Por culpa de este Gobierno, estamos en las calles y estamos sufriendo”, dijo en las últimas horas Enrique Mamani, uno de los dirigentes campesinos.
Explicó que el cierre de las principales carreteras se llevará a cabo mediante un “plan hormiga”, el cual se desarrollará de manera escalonada en diferentes puntos para “distraer” a la Policía, según explicó Mamani.
El anuncio de las nuevas movilizaciones fue respaldado por Morales, quien afirmó este domingo que la semana que comenzará el lunes "será una dura batalla, en defensa fundamentalmente de la economía, que está destrozada".
“Desde mañana, en toda La Paz, hay que hacer respetar el derecho económico de todos los bolivianos, defender la democracia y la justicia”, dijo el exgobernante en su programa dominical.
La semana pasada, los leales a Morales marcharon en La Paz y se enfrentaron en dos ocasiones con la policía, debido a la imposibilidad de entrar a las oficinas del Tribunal Supremo Electoral (TSE) para lograr la inscripción de su líder como candidato a la presidencia del país.
Asimismo, la Defensoría del Pueblo de Bolivia rechazó el viernes los "hostigamientos" contra algunas autoridades electorales, a menos de tres meses de las elecciones generales, y exhortó a los sectores movilizados en varias regiones a actuar dentro del marco de la ley y la democracia.
Un grupo de desconocidos detonó un explosivo en las inmediaciones de la casa de un vocal del Tribunal Electoral Departamental de la región central de Cochabamba. Ante las presiones, el vocal del TSE, Francisco Vargas, anunció que solicitará medidas cautelares ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Las protestas de los seguidores de Morales buscan que el TSE acepte la inscripción de su candidatura presidencial con el Partido de Acción Nacional Boliviano (Pan-Bol).
Sin embargo, aparte de que Morales no está habilitado, Pan-Bol perdió su personería jurídica porque en las elecciones nacionales de 2020 no alcanzó el 3 % de los votos.
Este bloque político reclama su "derecho" a participar en los comicios a raíz de un fallo judicial que ordenó al TSE emitir otra resolución justificada sobre la cancelación del partido, aunque no se especifica que el exgobernante pueda registrarse como candidato.