Una nueva tecnología de aviónica desarrollada en Escocia permitirá a Europa avanzar en el diseño de cohetes reutilizables de forma más rápida y económica, tras su incorporación al motor ARCOS, uno de los primeros motores aerospike europeos listos para vuelo.
El desarrollo es fruto de un acuerdo entre la empresa escocesa Aurora Avionics y la compañía española Pangea Propulsion, en un contexto de creciente competencia global en el sector espacial.
El sistema electrónico actuará como el “cerebro” y el “sistema nervioso” del motor ARCOS, gestionando sensores, datos y controles críticos. Según sus desarrolladores, esta solución modular permitirá a los fabricantes reducir tiempos y costos, al evitar el desarrollo desde cero de sistemas de control para cada lanzador.
Aurora Avionics, con sede en Edimburgo, se especializa en electrónica diseñada para operar en entornos extremos. Su cofundador y director ejecutivo, Oren Smith-Carpenter, explicó que la empresa busca cubrir un nicho inexistente hasta ahora en Europa: ofrecer sistemas de control listos para integrar, que liberen a las compañías espaciales de crear departamentos completos de aviónica.
Smith-Carpenter, de 25 años, inició su carrera como aprendiz en el sector aeronáutico y trabajó posteriormente en Orbex, uno de los principales proyectos de lanzadores del Reino Unido. Esa experiencia, según relató, le permitió identificar la necesidad de soluciones estandarizadas.
La compañía fue fundada en 2023 junto a Rowland Fraser, su director técnico, con apoyo inicial de la Agencia Espacial Europea, y opera desde el Higgs Centre for Innovation, en Edimburgo.
Fraser describió la aviónica como el elemento que gestiona miles de sensores en un cohete y aseguró que su sistema simplifica esa complejidad y facilita la escalabilidad sin rediseños constantes.
El motor ARCOS, propulsado por metano y oxígeno, representa uno de los proyectos más ambiciosos de la nueva propulsión espacial europea. La tecnología aerospike, perseguida durante décadas, maximiza la eficiencia desde el despegue hasta la órbita, permitiendo transportar mayor carga útil a menor costo.
Para Pangea Propulsion, la colaboración es estratégica. Su consejero delegado, Adrià Argemí, señaló que el aporte de Aurora Avionics es clave para avanzar en subsistemas críticos del motor. Los desarrolladores consideran que este tipo de alianzas fortalecerá la capacidad espacial europea y reducirá su dependencia de proveedores estadounidenses, en un momento de acelerada transformación del sector.