Empleada de Ayuntamiento Azua denuncia lleva casi dos años sin recibir su salario luego de sufrir caída

La trabajadora asegura que su fractura requiere costosos tratamientos y le impide trabajar. Exige a las autoridades locales solucionar su situación financiera y laboral de inmediato.

Una empleada del Ayuntamiento asegura que atraviesa una situación crítica luego de sufrir una lesión mientras desempeñaba sus funciones y afirma que, pese a estar nombrada, no ha recibido su salario en casi dos años. La mujer sostiene que tampoco le han recibido sus licencias médicas ni los documentos que certifican su condición de salud.

Denuncia falta de pago y de atención institucional

La denunciante, identificada como Gracia de Ida Familia, explicó ante las cámaras de RCC noticias que laboró durante cuatro años en la gestión anterior y seis meses en la actual, hasta que sufrió una caída que le provocó una fractura en la pierna y la llevó a una costosa cirugía.

En su testimonio, expresó: “Yo soy nombrada en el ayuntamiento. El dinero llega y el dinero no se me da y cada vez que voy me dicen que me van a poner a hablar con el síndico y me dejan plantada y no me ponen a hablar con el. Casi 2 años tengo sin cobrar en el ayuntamiento.”

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Agregó que tampoco le han recibido los documentos médicos que certifican su caso. Según explicó:
“No me aceptaron la licencia médica, no me quisieron recibir los referimientos. Ellos no quieren nada, nada. Ellos ni me dijeron que me iban a parar ni nada.”

Lesiones, gastos y dificultad para movilizarse

La afectada sufrió una fractura que requirió una cirugía valorada en RD$500,000, realizada en una clínica del sector El Millón. Sostuvo que los gastos médicos han sido constantes y que su condición física le impide trabajar con normalidad.

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Relató que, por recomendación médica, tuvo que dejar de vender agua y refrescos, actividad que realizaba para sostenerse, debido al dolor y la limitación al caminar. Indicó que:
“Yo vendo agua y refresco y el médico me lo quitó porque no puedo estar caminando vendiendo el agua y los refrescos, porque ya en la noche ya no puedo dormir con dolor en la pierna".

Además, señaló que debe viajar con frecuencia a Santo Domingo para consultas y estudios, lo que representa un gasto significativo para ella. Explicó que cada visita requiere entre dos y tres mil pesos solo en transporte.

En su llamado final, pidió una respuesta inmediata de las autoridades locales y expresó:

“Yo quiero hacerle el llamado al síndico de que se me entregue mi dinero… fue trabajándole a ellos que yo me caí y me di ese golpe y don Teo me niega darme mi dinero y mi dinero llega y no se me da.”