
La embajadora de Estados Unidos en República Dominicana, Leah Campos, reveló este martes que la administración del presidente Joe Biden ejerció presión política sobre el Gobierno dominicano para que mantuviera abierta la frontera con Haití. La diplomática ofreció estas declaraciones durante un almuerzo de la Cámara Americana de Comercio en el país (AMCHAMDR).
Campos explicó que la insistencia de Washington respondió al aumento sostenido de inmigrantes irregulares que llegaban a territorio estadounidense. Según afirmó, una parte de estos migrantes incluía personas que —en sus palabras— eran “delincuentes o personas sin ningún interés” en integrarse a la sociedad estadounidense.
La embajadora señaló que, ante ese escenario, la Casa Blanca buscaba evitar que la presión migratoria continuara creciendo por la ruta del Caribe, lo que derivó en solicitudes directas a Santo Domingo para que no interrumpiera el flujo fronterizo con Haití. No ofreció detalles sobre los canales utilizados ni sobre la respuesta del Gobierno dominicano en ese momento.
Las declaraciones de Campos se producen mientras la frontera dominico-haitiana mantiene controles reforzados y un nivel de vigilancia elevado debido a la crisis social, política y de inseguridad que afecta a Haití desde hace años.
La relación bilateral ha atravesado episodios de fricción, especialmente en torno al manejo migratorio y a las medidas aplicadas por República Dominicana para regular y restringir la entrada de ciudadanos haitianos.
Hasta ahora, el Gobierno dominicano no ha reaccionado a las afirmaciones de la diplomática, que reabren el debate sobre la presión internacional en torno a las decisiones de política migratoria del país y sobre la postura de Washington frente al deterioro de la situación haitiana.