El embajador dominicano ante la Santa Sede, Víctor Suárez, informó este lunes en el programa A Diario, que están a la espera de la convocatoria oficial al cuerpo diplomático para representar a la República Dominicana en las exequias del papa Francisco, fallecido este lunes a los 88 años.
Suárez explicó que el proceso sigue un protocolo muy estricto, por lo que los diplomáticos están atentos a las invitaciones oficiales. Añadió que el Papa dejó instrucciones claras sobre sus funerales, solicitando ser sepultado en la Basílica Papal de Santa María la Mayor y no en el Vaticano.
También comentó que el cuerpo diplomático esperaba verlo el domingo de Resurrección, ya que participó del tradicional mensaje urbi et orbi, recorrió la Plaza San Pedro y abordó el papamóvil, lo que consideró un gran esfuerzo del pontífice.
El exdiputado exdiputado del PLD por Santiago explicó que el repique de campanas en honor al papa Francisco tuvo un tono más pausado que en ocasiones anteriores, como cuando se elige un nuevo pontífice, pero igualmente significativo. Señaló que las campanas resonarán 88 veces, en alusión a la edad del papa al momento de su fallecimiento.
Suárez destacó que el pontífice, hasta sus últimos días, demostró su compromiso con el servicio. Recordó que participó en actos como el lavatorio de pies a presos, recibió al vicepresidente de Estados Unidos, bendijo a los fieles en la Plaza San Pedro y se dejó ver en el papamóvil durante el domingo de Resurrección, en el mismo lugar donde será sepultado.
El diplomático señaló que en representación de la República Dominicana solo la embajada ante la Santa Sede participará en los actos fúnebres, ya que el país no cuenta con un consulado en el Vaticano.
Respecto a la sucesión papal, Suárez consideró prematuro hablar de reemplazos, aunque ya se mencionan posibles candidatos de América Latina, Europa, África y Asia. Subrayó que, por la situación actual del cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, el país no tendrá participación en el cónclave.
Recordó además que, según disposiciones del papa emérito Benedicto XVI, este proceso puede comenzar incluso antes de los 15 días si todos los cardenales ya se encuentran en Roma, dado que el cortejo fúnebre durará seis días.