Estados Unidos anunció la designación como organizaciones terroristas de cuatro grupos europeos vinculados al movimiento “antifa”, considerados por el Departamento de Estado como organizaciones anarquistas y revolucionarias. La medida afecta a dos grupos griegos, uno alemán y uno italiano, que desde este jueves figuran como organizaciones terroristas globales especialmente designadas (SDGT, por sus siglas en inglés).
A partir del 20 de noviembre, estos grupos también serán clasificados formalmente como organizaciones terroristas extranjeras (FTO), lo que implicará la congelación de sus activos, la prohibición de transacciones con ciudadanos estadounidenses, sanciones penales por brindar apoyo material y restricciones migratorias para sus integrantes.
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La FAI, surgida en Italia, se autodefine como un grupo anarquista y revolucionario y es conocida por enviar paquetes explosivos dirigidos a funcionarios europeos. Su actividad se remonta a 2003, cuando se atribuyó un envío de bomba al entonces presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi.
Desde entonces, ha reivindicado ataques contra figuras de alto perfil, como:
También ha sido responsable de atentados en embajadas y contra directivos de empresas, como el ataque en 2012 contra Roberto Adinolfi, de Ansaldo Nucleare.
Conocido también como Antifa East o Hammerbande, este grupo alemán asegura luchar contra el fascismo y la extrema derecha. Las autoridades lo vinculan con agresiones contra personas consideradas “fascistas” y con ataques registrados entre 2018 y 2023, además de incidentes en Budapest durante una contramanifestación contra una marcha neonazi.
Este grupo anarquista y anticapitalista se ha atribuido ataques con artefactos explosivos contra objetivos estatales griegos. Uno de los más destacados fue una bomba colocada cerca del cuartel general de la policía antidisturbios en Goudi, el 18 de diciembre de 2023.
En sus comunicados aseguran realizar llamadas de advertencia para evitar víctimas civiles, aunque han prometido continuar sus acciones contra fuerzas policiales.
Este grupo griego se dio a conocer en febrero de 2024, cuando hizo estallar un artefacto explosivo frente al Ministerio de Trabajo en Atenas, causando daños materiales pero sin heridos. En 2025 reivindicó un segundo ataque, esta vez contra la sede de Hellenic Train, justificándolo por el accidente ferroviario que causó 57 muertos en 2023.
La policía griega sospecha que la organización ha estado vinculada a ataques desde 2018, aunque solo ha reivindicado los dos más recientes.