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Los fiscales federales de Estados Unidos informaron que no buscarán la pena de muerte para Joaquín Guzmán López, hijo del narcotraficante mexicano Joaquín “El Chapo” Guzmán, en caso de ser hallado culpable de los cargos que enfrenta en Chicago.
El anuncio fue realizado por el fiscal Andrew Boutros a través de una notificación formal, en la que no se ofrecieron detalles sobre los motivos de esta decisión. Guzmán López está acusado de múltiples delitos relacionados con el narcotráfico y el lavado de dinero.
Su abogado, Jeffrey Lichtman, expresó satisfacción con la decisión, afirmando que es “la correcta” y que su cliente espera resolver los cargos en su contra. Guzmán López se ha declarado inocente.
Según los fiscales, Joaquín y su hermano Ovidio Guzmán López lideraban una facción del Cártel de Sinaloa conocida como “Los Chapitos”, involucrada en la exportación de fentanilo a Estados Unidos.
Joaquín Guzmán López fue arrestado en julio de 2024, junto a Ismael "El Mayo" Zambada, luego de aterrizar en Texas en un avión privado. Zambada enfrenta cargos en Nueva York y ha alegado que fue secuestrado por Guzmán López.
Ovidio Guzmán, detenido en México en 2023 y extraditado a EE. UU., también se ha declarado inocente. Sin embargo, tiene programada una audiencia el próximo 9 de julio, donde se espera que cambie su declaración como parte de un posible acuerdo con la fiscalía.
Ambos hermanos enfrentan cargos por tráfico internacional de drogas, lavado de activos y posesión de armas. Las autoridades estadounidenses continúan procesando a miembros clave del Cártel.