
El Tribunal Colegiado de la provincia La Altagracia condenó este martes a 30 años de prisión a Carmen Jiménez, hallada culpable de torturar y asesinar a su sobrino de 8 años , en un hecho registrado en la comunidad de Verón de la provincia, el pasado año.
Según el expediente presentado por el Ministerio Público, la mujer sometió al niño a un patrón sistemático de maltratos físicos y psicológicos que culminaron en su muerte. El menor vivía bajo su custodia al momento de los hechos.
El niño falleció tras recibir 147 heridas y presentó signos de maltrato extremo. El Ministerio Público sostiene que Carmen Jiménez admitió haber agredido al menor de forma continua, alegando problemas de conducta del menor.