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El cónsul general de los Estados Unidos en República Dominicana, William Swaney, afirmó que respeta el derecho de cada país a controlar sus fronteras y aplicar sus normas migratorias, en referencia al proceso de repatriación de ciudadanos en situación irregular que lleva a cabo el Gobierno dominicano.
Durante su participación en el programa El Sol de la Mañana, Swaney sostuvo que lo importante es que los procesos se realicen de manera rápida y humana, diferenciando con claridad entre quienes tienen un estatus legal y quienes no.
En cuanto a Haití, el diplomático reconoció las dificultades que atraviesa ese país y explicó que gran parte de los servicios consulares para ciudadanos haitianos fueron trasladados a las Bahamas. No obstante, puntualizó que en Santo Domingo se atienden algunos casos, sobre todo de residentes en República Dominicana.
Swaney ofreció varias aclaraciones sobre el uso de visas. Subrayó que la categoría B1/B2 de turismo y negocios no autoriza a trabajar en Estados Unidos, y que quienes violen esa disposición arriesgan la cancelación de su visado. También respondió preguntas sobre la renovación de visas para estudiantes deportistas, recordando que cada caso es evaluado según la motivación de permanencia.
Respecto al tiempo de estadía permitido, advirtió que aunque las autoridades migratorias suelen otorgar hasta seis meses, no significa que los visitantes deban permanecer todo ese tiempo, ya que hacerlo con frecuencia puede generar sospechas y complicaciones en futuras solicitudes.
El cónsul lamentó que Estados Unidos no cuente con un embajador en República Dominicana desde hace varios años, lo que —dijo— puede transmitir la impresión de que la relación bilateral no recibe la importancia debida, pese a que en la práctica la cooperación es estrecha.
Al abordar las visas humanitarias, explicó que en casos médicos urgentes se pueden procesar solicitudes rápidas, siempre que los interesados presenten la documentación que justifique la necesidad y garantice su regreso al país.
En un tono más cercano, Swaney compartió su aprecio por la cultura dominicana, revelando que disfruta recorrer el país en motocicleta, bailar merengue y bachata junto a su esposa, y conocer la calidez de la gente. Destacó además el papel fundamental del personal dominicano en la Embajada de Estados Unidos, a quienes calificó como “esenciales para que todo funcione”.