Un hombre fue condenado a seis años de prisión tras agredir violentamente a un oficial durante un festival de música en Ponce de León, Florida, según informó la Oficina del Fiscal del Estado, Larry Basford.
El agresor, identificado como James Michael Anderson, de 37 años, atacó a un oficial del Departamento del Sheriff del Condado de Holmes, causando la pérdida de un pedazo del cuero cabelludo y dejando expuesto su cráneo.
El incidente ocurrió el 5 de mayo de 2024, durante el SolFest, un evento que reunió a aproximadamente 10,000 personas durante cuatro días.
De acuerdo con el medio New York Post, el ataque comenzó cuando Anderson intentó arrebatarle el arma reglamentaria al oficial de su funda. Al no conseguirlo, procedió a morderle la cabeza con tal fuerza que provocó una herida profunda y desgarradora.
Tras ser reducido por varios agentes, Anderson, quien estaba bajo los efectos de una combinación de drogas que incluía PCP, LSD, ketamina, hongos alucinógenos y éxtasis, se quejó de que tenía “cabello en los dientes”. El oficial, cuya identidad no ha sido revelada, sufrió una lesión grave que dejó cicatrices significativas, aunque ha logrado recuperarse y continúa desempeñando sus funciones en el Departamento del Sheriff del Condado de Holmes.
Un ataque que conmocionó a las autoridades locales
El fiscal jefe Jacob Cook, quien estuvo a cargo del caso, calificó la mordida como “la herida más severa por mordedura” que ha visto en su carrera en Florida. En un comunicado, enfatizó que la violencia contra los agentes de la ley no será tolerada y que quienes cometan este tipo de actos enfrentarán consecuencias severas.
“Este acusado pasará los próximos años en prisión pagando por sus acciones violentas”, afirmó.
Según detalló la Oficina del Fiscal del Estado, Anderson estaba presente en el evento como voluntario. Durante el altercado, los agentes intentaron someterlo utilizando una pistola eléctrica, pero el hombre resistió los efectos del dispositivo antes de ser finalmente inmovilizado por varios oficiales.
Condena y medidas adicionales tras el juicio
El pasado viernes, Anderson se declaró culpable del cargo de agresión agravada contra un oficial de la ley en el Tribunal de Circuito del Condado de Holmes. El juez Russell Roberts dictó una sentencia de seis años de prisión, seguida de diez años de libertad condicional bajo supervisión por delitos graves.
Según informó la Oficina del Fiscal del Estado, la condena refleja la gravedad del ataque y busca enviar un mensaje claro sobre las consecuencias de agredir a las fuerzas del orden. El caso también destacó la labor del Departamento del Sheriff del Condado de Holmes, que no solo manejó el incidente de manera efectiva, sino que también gestionó la seguridad de un evento masivo con miles de asistentes.
El fiscal Basford agradeció al departamento por su trabajo tanto en la investigación como en el control de la multitud durante el festival.
Impacto en la comunidad y en las fuerzas del orden
El oficial agredido, a pesar de las cicatrices físicas y emocionales que dejó el ataque, ha decidido continuar con su labor en el Departamento del Sheriff del Condado de Holmes. Su recuperación y regreso al trabajo han sido vistos como un ejemplo de resiliencia y dedicación al servicio público.
Por su parte, el festival SolFest, que atrae a miles de asistentes cada año, enfrenta ahora un escrutinio adicional en cuanto a las medidas de seguridad y control de sustancias en futuros eventos. Aunque el ataque fue un incidente aislado, ha puesto de manifiesto los desafíos que enfrentan los organizadores y las autoridades locales para prevenir situaciones similares.