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El expresidente brasileño Jair Bolsonaro conocerá a partir del martes su destino en el juicio que enfrenta por golpismo, un proceso considerado histórico para la democracia en Brasil. El caso, que acapara la atención internacional, cuenta con un elemento singular: el respaldo del presidente estadounidense Donald Trump, que se ha reservado un papel en apoyo al líder ultraderechista.
Entre el 2 y el 12 de septiembre, cinco jueces del Tribunal Supremo, incluido el emblemático y criticado magistrado Alexandre de Moraes, celebrarán cinco jornadas de audiencias para decidir si condenan o absuelven al exmandatario (2019-2022) y a siete de sus excolaboradores.
Con 70 años, Bolsonaro enfrenta hasta 40 años de prisión. Según la acusación, habría conspirado para mantenerse en el poder de forma autoritaria pese a la victoria del izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva en las elecciones de 2022.
La fiscalía sostiene que el plan incluía incluso el asesinato de Lula antes de su investidura, así como del juez Moraes, todo ello con el “consentimiento” de Bolsonaro.
El expresidente permanece en arresto domiciliario desde hace casi un mes en Brasilia, con tobillera electrónica, y seguirá el juicio desde su casa. El proceso será transmitido en directo, según una fuente de
su entorno.
Su hijo Carlos Bolsonaro reveló el viernes en la red social X que su padre atraviesa un delicado estado de salud: “El viejo está delgado, no quiere alimentarse y sigue enfrentando interminables crisis de hipo y vómitos. Duele mucho ver todo esto”.
Bolsonaro arrastra problemas médicos desde que sufrió una puñalada en el estómago durante la campaña de 2018, lo que le ha ocasionado múltiples complicaciones posteriores.
En caso de condena, que podría ser apelada, fuentes del tribunal advierten que es posible un encarcelamiento inmediato del exmandatario.
El juicio se desarrolla en un contexto de tensión política y diplomática, con Brasil intentando preservar la estabilidad democrática mientras enfrenta, además, los efectos de la guerra comercial impulsada por Trump para respaldar a su aliado ideológico.