
Cinco oficiales penitenciarios resultaron heridos, tres de ellos apuñalados, tras un violento ataque perpetrado por seis reclusos en la Prisión Estatal de Wallens Ridge, en el oeste de Virginia, según informó el Departamento de Correcciones del estado.
Según un comunicado oficial, cinco de los atacantes son miembros confirmados de la pandilla salvadoreña MS-13 y se encontraban ilegalmente en Estados Unidos. El sexto implicado es un ciudadano estadounidense con vínculos con otra organización criminal.
El ataque ocurrió el pasado viernes y provocó que tres de los oficiales fueran trasladados de urgencia a centros médicos con heridas de arma blanca, mientras que otros dos fueron atendidos por lesiones menores. Tres de ellos fueron dados de alta el mismo día, mientras que los otros permanecen hospitalizados en condición estable.
Chad Dotson, director del Departamento de Correcciones de Virginia, lamentó el suceso y criticó que algunos de los implicados hubieran ingresado al país.
"Cinco de los individuos responsables de este ataque nunca deberían haber estado en este país desde un principio. Este acto brutal refleja los peligros que nuestros oficiales enfrentan cada día", expresó Dotson.
Las autoridades indicaron que todos los implicados cumplen condenas por delitos violentos, incluidos asesinato y violación. A raíz del incidente, se ha iniciado una investigación interna para esclarecer los detalles y las responsabilidades del hecho.
Hasta el momento, no se han revelado más detalles debido a que la investigación sigue en curso. Según la vocera del Departamento, Carla Miles, se desconoce si alguno de los oficiales sigue hospitalizado.
El caso resalta nuevamente las preocupaciones sobre la presencia de pandillas violentas en el sistema penitenciario y el impacto de la inmigración irregular en la seguridad de las instituciones.