Haitianos que residían de forma irregular en sectores como Hoyo de Friusa y Mata Mosquito, en Verón-Punta Cana, así como en otras zonas del territorio nacional, han comenzado a retornar voluntariamente a su país de origen.
Durante el pasado fin de semana, se reportó la salida de al menos 649 ciudadanos haitianos por diferentes pasos fronterizos. Dajabón registró la mayor cantidad de retornos, con 566 personas —incluyendo hombres, mujeres y niños—. A estos se suman 18 salidas por Elías Piña, 15 por Jimaní y 50 por Pedernales.
Estas salidas voluntarias se producen en un contexto de operativos desplegados por el Ejército de República Dominicana y la Dirección General de Migración, especialmente en la zona de Friusa, desde la semana pasada. Las autoridades han reforzado la presencia en el área para garantizar el control migratorio y la seguridad en la región.
Este flujo migratorio se da en medio de la implementación de nuevas medidas adoptadas por el gobierno dominicano, encabezado por el presidente Luis Abinader, con el fin de reforzar el control de las leyes migratorias y preservar la seguridad nacional.
Dichas acciones están siendo ejecutadas por el Ejército de República Dominicana en conjunto con la Dirección General de Migración y las Fuerzas Armadas, a través de operativos de interdicción.
Se estima que en las próximas horas la cifra de ciudadanos haitianos que decidan salir del país por voluntad propia podría seguir en aumento.
Mensaje del presidente Abinader
El presidente Luis Abinader recomendó este domingo a los miles de haitianos indocumentados que viven en su país «marcharse voluntariamente» o, de lo contrario, «serán buscados y repatriados», como parte de una serie de medidas para enfrentar la inmigración irregular desde el vecino Haití, sumido desde hace años en una crisis en todos los niveles.
En un mensaje a la nación, en el que volvió a criticar a la comunidad internacional por la falta de acción ante la crisis haitiana, Abinader dio a conocer quince medidas para abordar la situación, entre ellas el envió a la frontera de 1.500 soldados, que se sumará a los 9.500 que vigilan la zona, lo que evitará, dijo, que «la violencia que destruye a Haití», impuesta por las bandas armadas, se traslade a la República Dominicana, que también desplegará 750 agentes migratorios en todo el territorio.
También se acelerará la construcción del muro fronterizo, de acuerdo con el mandatario, que adelantó, además, que en el anteproyecto de reforma del Código Laboral que se discute en el Congreso Nacional (bicameral) se establecerán consecuencias para los empleadores que contraten haitianos indocumentados, con alta presencia en los sectores de la construcción y la agricultura.
Abinader, quien dijo que «comparte» la «preocupación» de muchos dominicanos «por la amenaza que representa Haití y la carga de la migración irregular en los hospitales y escuelas del país, anunció una Procuraduría Especializada en Asuntos Migratorios y un proyecto para reformar el marco legal migratorio existente, al tiempo que recordó en su discurso que desde hace casi dos años los consulados dominicanos en Haití no emiten visas, ya que están cerrados desde el 2023.
«El problema es la entrada irregular, por eso tenemos que ser firmes, recomendamos a aquellos que se encuentren en nuestro territorio en condición irregular marcharse voluntariamente o serán buscados y repatriados», precisó el mandatario, quien subrayó que «Haití atraviesa la hora más oscura de su historia, por múltiples crisis», entre ella la violencia de las bandas y la situación económica.
Para controlar la afluencia a los hospitales de indocumentados, anunció un protocolo, que deberá estar listo para su aplicación el lunes 21 de abril y que obligará al personal de los hospitales exigir los haitianos una identificación, una carta de trabajo en el país y prueba domiciliaria.
También se acordará una tarifa para todos los servicios brindados, señaló, y dijo que en el caso de no cumplir con ninguno de estos requisitos, el paciente será atendido, pero repatriado inmediatamente, por lo que habrá «un agente migratorio en cada hospital para garantizar el cumplimiento de este protocolo».
En octubre pasado, el presidente Abinader ordenó la deportación masiva de migrantes en situación irregular, unos 10.000 por semana, lo que afecta en su práctica totalidad a los haitianos.
Desde que se tomó esta medida, según datos oficiales, más de 180.000 haitianos en situación irregular han sido deportados a Haití, pese a los llamados de organizaciones y organismos internacionales para que no se lleven a cabo devoluciones a un país donde en 2024 más de 5.600 personas murieron a causa de la violencia.