
China criticó este miércoles a Estados Unidos por lo que considera una estrategia de bloqueo contra sus empresas, tras el anuncio del servicio postal estadounidense (USPS) de suspender temporalmente la recepción de paquetes procedentes de China y Hong Kong.
Aunque la medida fue revertida poco después, afectaría a gigantes del comercio en línea como Temu y Shein.
"Instamos a Estados Unidos a dejar de politizar e instrumentalizar los asuntos comerciales y económicos y a frenar la represión irrazonable contra las empresas chinas", declaró Lin Jian, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, quien pidió diálogo entre ambas naciones.
Estados Unidos indicó que la suspensión del servicio postal sería indefinida, pero posteriormente anunció que continuaría aceptando envíos de China. Esta medida se suma a la reciente decisión de Washington de eliminar la exención de aranceles para paquetes de bajo valor, una política implementada durante la presidencia de Donald Trump.
Hasta ahora, los productos con un valor inferior a 800 dólares podían ingresar al país sin pagar impuestos. Sin embargo, el gobierno estadounidense argumenta que esta exención ha beneficiado de manera desproporcionada a plataformas de comercio electrónico chinas y dificultado la aplicación de normativas en materia de salud, seguridad y propiedad intelectual.
Además, Washington anunció nuevos aranceles del 10% sobre productos chinos, lo que ha avivado la tensión entre las dos potencias. Pekín respondió con la imposición de impuestos a bienes estadounidenses, incluyendo petróleo y maquinaria agrícola, y con restricciones a la exportación de metales estratégicos utilizados en industrias clave.
La eliminación de la exención arancelaria podría afectar significativamente a plataformas como Shein y Temu, que dependen de la venta de productos a precios bajos. También podría impactar a compañías estadounidenses como Amazon, que maneja una gran cantidad de importaciones desde China.
Mientras tanto, la Comisión Europea evalúa aplicar impuestos a los miles de millones de paquetes que ingresan a la Unión Europea desde plataformas de comercio digital, en su mayoría provenientes de China.
Las medidas de represalia anunciadas por China, que entrarán en vigor el 10 de febrero, afectarán a bienes estadounidenses por un valor estimado de 20.000 millones de dólares. No obstante, su impacto es menor en comparación con los aranceles adicionales de Estados Unidos, que afectan aproximadamente a 450.000 millones de dólares en productos chinos.