Chauncey Billups, exjugador de la NBA y miembro del Salón de la Fama, y Damon Jones, también exbasquetbolista, están acusados de colaborar con tres familias de la mafia en Estados Unidos para atraer a jugadores a partidas de póker ilegales, donde, según el Departamento de Justicia, se habrían sustraído millones de dólares a los participantes.
El abogado de Billups, Chris Heywood, negó categóricamente las acusaciones:
"Creer que Chauncey Billups hizo lo que el gobierno federal le acusa es creer que arriesgaría su legado en el Salón de la Fama, su reputación y su libertad. No pondría esas cosas en peligro por nada, y mucho menos por una partida de cartas".
El Departamento de Justicia detalló que las familias Bonanno, Gambino y Genovese organizaron partidas clandestinas en Manhattan y otros estados, usando mesas con rayos X, cartas marcadas, barajadores manipulados y lentes con sensores. Billups y Jones habrían actuado como "Cartas de Figura", atrayendo a jugadores desprevenidos para incrementar el prestigio y la asistencia a los juegos.
"Durante años, estos individuos presuntamente organizaron partidas ilegales de póker utilizando tecnología sofisticada y reclutando a jugadores y exjugadores de la NBA para estafar a la gente por millones de dólares", declaró la comisionada del Departamento de Policía de Nueva York, Jessica Tisch, según el Departamento de Justicia.
"Este complejo esquema fue tan complejo que incluyó a miembros de cuatro familias del crimen organizado, y cuando las personas se negaron a pagar porque habían sido engañadas, estos acusados hicieron lo que el crimen organizado siempre ha hecho: usaron amenazas, intimidación y violencia".
Las partidas incluían barajadores mecánicos manipulados y un sistema de transmisión inalámbrica de la información de las cartas a un jugador designado como "Quarterback", quien enviaba señales manuales a otros jugadores en la mesa. Según las acusaciones, esto aseguraba que los conspiradores conocieran de antemano las manos ganadoras.
En la comunidad del póker, desde 2023, se rumoraba sobre la falta de honestidad en las partidas asociadas a Billups, con advertencias de jugadores profesionales como Matt Berkey, quien se negó a participar por confirmar que las partidas estaban amañadas:
"Sí, saben lo que viene. No tienes que ser bueno si conoces la baraja de principio a fin. Claro que se ven mal".
"La apuestan sin equidad sabiendo que van a ganar la maldita mano. Bastante difícil, ¿sabes?"
El Departamento de Justicia presentó estas acusaciones a través de una acusación formal de 22 páginas, un comunicado de prensa y una conferencia en la que participaron el director del FBI, Kash Patel, y el fiscal federal Joseph Nocella.
El caso pone a Billups, conocido por su trayectoria deportiva, en el centro de un escándalo de póker de alta tecnología vinculado al crimen organizado, aunque su abogado sostiene que él no pondría en riesgo su reputación ni su libertad por participar en este tipo de actividades.