Las investigaciones sobre los sobornos de Odebrecht en Perú han resultado en la condena de un expresidente y varios empresarios, acumulando hasta ahora 65 sentencias, 22 acusaciones formales y más de 1,200 millones de dólares en reparaciones civiles, según la fiscalía.
Durante una presentación sobre el avance del caso, el equipo de fiscales informó que aún hay más de 100 procesos judiciales en marcha, en los que están implicados exmandatarios, exministros y otras figuras de alto nivel en el ámbito político y económico.
En total, 851 personas están bajo investigación, junto con 57 empresas. Además, 252 individuos y 40 compañías ya han sido acusados formalmente.
Rafael Vela, fiscal a cargo del caso, destacó la complejidad del proceso y el impacto que ha tenido en los investigadores, quienes han sido blanco de campañas de desprestigio. “Quienes confrontan a sus investigadores buscan desprestigiarlos”, afirmó.
El caso involucra delitos de lavado de activos y corrupción transnacional vinculados a redes criminales, algunas con alcance internacional. Vela recordó que las investigaciones comenzaron en 2016, luego de que Odebrecht admitiera ante autoridades de EE.UU. que había pagado sobornos en varios países, incluido Perú, para obtener contratos de infraestructura.
Para acceder a información clave sobre corrupción y lavado de dinero, la fiscalía peruana gestionó 1,182 solicitudes de cooperación judicial a países como Brasil, Suiza y Andorra.
Hasta el momento, se han asegurado 1,219 millones de dólares en reparaciones civiles, de los cuales 81 millones ya han sido abonados. El resto está respaldado mediante un fideicomiso y medidas para evitar la disposición de bienes.
En 2024, Alejandro Toledo (2001-2006) fue sentenciado a 20 años de prisión por colusión y lavado de activos, tras recibir sobornos de Odebrecht para adjudicar un proyecto vial. Extraditado desde EE.UU., se encuentra encarcelado en Perú desde abril de 2023.
Otros dos exmandatarios también enfrentan procesos: la fiscalía ha solicitado 20 años de prisión para Ollanta Humala (2011-2016) por lavado de activos, mientras que Pedro Pablo Kuczynski (2016-2018) sigue bajo investigación por colusión, con una orden que le impide salir del país y parte de su pensión embargada.
El caso tuvo su desenlace más trágico en 2019, cuando el expresidente Alan García (2006-2011) se quitó la vida momentos antes de ser detenido de manera preliminar por presunta recepción de sobornos de Odebrecht.