Los comunitarios de Cotuí que desde hace varios días se mantienen en pie de lucha demandando un pago justo por sus terrenos, sembradíos y viviendas por parte de la minera Barrick Gold irán hoy a la reunión organizada en el obispado de La Vega.
Pese a que han confirmado la asistencia, las organizaciones comunitarias advirtieron que mantendrán su propuesta de precio justo tanto por sus viviendas y terrenos, como por sus siembras.
Martín Guzmán, coordinador de la Comisión de Reasentamientos Involuntarios de las comunidades de El Rayo, Los Naranjos, Los Higo, Las Tres Bocas, Arroyo Vuelta, Zambrana y La Lajas, manifestó que emitirán un documento donde denunciarán las agresiones de las que han sido objeto por los militares y policías, que según dijo, están del lado de la empresa y del Gobierno.
Guzmán indicó que tienen previsto realizar una marcha pacífica que tendrá dos puntos de inicio, el primero desde Maimón y el segundo desde Cotuí, a la que se espera asistan delegaciones de San Francisco de Macorís, Salcedo, Licey, Navarrete y Bonao, entre otras localidades que buscan también hacerse sentir mediante su presencia.
El dirigente comunitario catalogó como una estafa lo que quieren hacer con los campesinos, y sentenció que ni Cotuí, ni el resto del país permitirán esa acción, por lo que expresó se mantendrán firmes en su posición.
Explicó además que, en el lugar donde se pretende construir la presa de cola, hay una producción de cacao y otros frutos, los cuales son la fuente de sustento de sus familias.
Precisa Guzmán que a los productores les han ofrecido no más que la suma de 2 mil 195 pesos por mata, cuando los precios estandarizados de manera internacional sobrepasan los 5 mil, lo que representa una pérdida de más de un 65 por ciento en cada unidad, sin contar que por las de otros frutos le ofrecen menos de un 10 por ciento.
Sostuvo que el Gobierno debe enviar a la comunidad a funcionarios que no tengan o defiendan intereses particulares, como es el caso del ministro de Energía y Minas, Joel Santos, señalado como cuñado de Juana Barceló, quien según Guzmán, es gerente y accionista de la Barrick Gold.