
El presidente de la República destituyó a los titulares de la Oficina para el Reordenamiento del Transporte (OPRET) y de la Empresa de Transmisión Eléctrica Dominicana (ETED), en un movimiento que, según el coordinador de El Sol de la Mañana, Julio Martínez Pozo, reconoce fallas operativas graves en ambas instituciones.
Martínez Pozo recordó que “el administrador de la empresa de transmisión eléctrica dominicana era Martín Robles y fue destituido”, explicando que el presidente actuó ante señales de deficiencias que aún deben ser esclarecidas.
Para la OPRET, el mandatario destituyó al ingeniero Rafael Santos y en su lugar nombró a Jhael Isa, quien además continuará como director ejecutivo honorífico del Fideicomiso para el Desarrollo del Sistema de Transporte Masivo (FITRÁN), indicó el comunicador.
Sobre Santos, Martínez Pozo lamentó la situación, pero subrayó que era necesaria. “El ingeniero Santos decir que es un caso lamentable (…) pero sí él tenía que ser destituido”, afirmó.
El comunicador sostuvo durante su comentario de este lunes que la destitución de Santos no responde a escándalos éticos ni a irregularidades administrativas, sino a la responsabilidad técnica asociada a la operación del Metro de Santo Domingo.
“No se trata de un funcionario que lo cancelan porque hubo un escándalo de corrupción (…) digamos que ineficiencia”, señaló.
El coordinador de El Sol de la Mañana hizo énfasis en la gravedad del hecho revelado por el propio exdirector de la OPRET, cuando reconoció que el sistema estuvo operando sin un mecanismo de respaldo para emergencias.
Recordó que durante el reciente incidente, los pasajeros quedaron atrapados y debieron caminar por las vías, pero que, “no tenemos decenas de muertos y de heridos, como pudimos haberlo tenido”. Añadió que, ante esa situación, “ahí la Virgen de la Alta Gracia (…) nos protegió”.
Según el comunicador, la propia respuesta del exdirector Santos a una denuncia pública terminó agravando su posición. “Él al hacer esa denuncia porque él estaba respondiendo a una denuncia de Lenin Fernández y quién hizo la denuncia peor fue él. Grave, grave, grave”, indicó.
En cuanto a la ETED, Martínez Pozo observó que la destitución del director también envía un mensaje claro en relación con el informe que circula sobre el apagón nacional.
El analista insistió en que el país merece una explicación completa: “Hay que decirle al país qué fue lo que pasó ahí y establecer las responsabilidades”. Preguntó además si la falla fue “voluntario o fue involuntario”, y si hubo condiciones fortuitas o decisiones negligentes.
Finalmente, indicó que al remover al director de la ETED, el presidente “le está dando aquiescencia a las cosas que están planteadas en ese informe que se dice que no es oficial”, y reiteró la necesidad de una investigación definitiva antes de que “venga el tiempo” y el tema quede en el olvido.