
El Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF) aprobó dos préstamos a República Dominicana por un monto total de 566 millones de dólares, destinados a fortalecer la seguridad hídrica del Gran Santo Domingo y a modernizar el sistema penitenciario nacional.
A través de un comunicado, el organismo multilateral indicó que ambas iniciativas responden a prioridades estratégicas del país y contribuirán a mejorar la calidad de vida de millones de dominicanos.
La primera operación contempla un financiamiento de hasta 300 millones de dólares para el Proyecto de Acueducto Presa Hatillo–Santo Domingo. La obra permitirá construir infraestructura para la captación, conducción, potabilización y distribución de agua potable desde el embalse de Hatillo, ubicado en el noreste del país, hacia la capital.
El proyecto será ejecutado por la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD) y ampliará la oferta de agua en cinco metros cúbicos, lo que favorecerá una mayor continuidad del servicio y fortalecerá la gobernanza, la gestión integrada y la sostenibilidad del recurso hídrico.
Según la información, se trata de la mayor intervención de agua para el Gran Santo Domingo, alineada con la Estrategia Nacional de Desarrollo (END), y beneficiará a aproximadamente 2.7 millones de habitantes.
La segunda operación corresponde al Programa de Reforma y Modernización del Sistema Penitenciario, con un financiamiento de 266 millones de dólares, que será ejecutado por el Ministerio de Vivienda, Hábitat y Edificaciones.
El programa busca reducir la reincidencia y promover la reinserción social efectiva de las personas privadas de libertad mediante la construcción y adecuación de centros de corrección y rehabilitación dignos y seguros.
La inversión permitirá mejorar las condiciones físicas, funcionales y programáticas del sistema penitenciario, así como fortalecer su rol en la cohesión social, la seguridad ciudadana y la reintegración laboral.
El presidente del CAF, Sergio Díaz-Granados, afirmó que estas operaciones reflejan el compromiso del organismo con el desarrollo integral de República Dominicana y con sectores clave como el agua, el saneamiento y la seguridad, que impactan directamente en el bienestar y el crecimiento sostenible del país.