Un menor de 15 años denunció haber sido víctima de agresión sexual por parte de un hombre identificado como «masajista deportivo» en Jarabacoa, contra quien pesa una orden de captura.
Según el relato de los familiares, el adolescente conoció al supuesto agresor, apodado “Buchón”, a través de la práctica de fútbol en el oratorio del colegio, donde el acusado supuestamente ofrecía servicios de masajes a los jugadores, aunque no era empleado del centro educativo.
El incidente, según la denuncia presentada en la fiscalía de Jarabacoa, ocurrió el pasado viernes, cuando el joven habría sido invitado por “Buchón” a su hogar bajo el pretexto de recibir un masaje para aliviar una molestia en una pierna.
Una vez en la vivienda, indicó el documento al que un medio de comunicación tuvo acceso, el hombre inmovilizó al menor colocando “varios electrodos en los músculos, a alta frecuencia” y abusó sexualmente de él. El abuso se habría visto interrumpido por la llegada inesperada de otra persona a la casa, lo que permitió que el menor escapara.
Al día siguiente, el joven informó del incidente a su entrenador de fútbol, quien de inmediato notificó a la madre. La denuncia fue presentada ante las autoridades locales, quienes iniciaron una investigación.
Según información proporcionada por familiares, el presunto agresor habría intentado contactar al adolescente después del incidente, enviándole mensajes por WhatsApp en los que le pedía que no revelara lo sucedido para no perjudicar su carrera profesional. Dichos mensajes habrían llegado cuando el joven hablaba con el entrenador y decían: “Necesito hablar contigo loco, como tú me vas hacer ese daño loco, tú sabes lo mal que me siento loco y tú sabes que eso puede dañar mi carrera”. El entrenador habría intervenido, sugiriendo que bloqueara al señalado y entregara el celular a las autoridades como evidencia.
El caso está bajo investigación por la Policía Nacional y el Ministerio Público, quienes buscan dar con el paradero del presunto agresor. Se presume que podría haber más víctimas, por lo que las autoridades han instado a los padres a estar alertas ante cualquier señal de abuso.