
El expresidente de Brasil Jair Bolsonaro fue sometido este jueves a una cirugía por una hernia inguinal bilateral, procedimiento que se realizó “con éxito y sin complicaciones”, según informó su esposa, Michelle Bolsonaro, a través de sus redes sociales.
La intervención tuvo lugar en un hospital privado de Brasilia, adonde el exmandatario fue trasladado tras recibir una autorización judicial temporal para salir del centro donde cumple condena. Bolsonaro se encuentra privado de libertad desde finales de noviembre, tras ser sentenciado a 27 años de prisión por liderar un intento de golpe de Estado luego de las elecciones presidenciales de 2022.
El permiso para la operación fue concedido por el juez Alexandre de Moraes, magistrado del Supremo Tribunal Federal y relator del proceso judicial contra el exgobernante. Según lo dispuesto, durante su estadía hospitalaria Bolsonaro solo puede estar acompañado de manera permanente por su esposa, mientras que algunos de sus hijos cuentan con autorización para visitas breves y puntuales.
Previo a ingresar al quirófano, su hijo Flávio Bolsonaro, senador de la República, leyó ante la prensa una carta escrita por el propio exmandatario, en la que reafirma a Flávio como su heredero político y eventual candidato presidencial para las elecciones de 2026.
Bolsonaro, capitán retirado del Ejército, arrastra desde hace meses diversos problemas de salud, entre ellos episodios de vómitos, mareos y crisis persistentes de hipo, condiciones que los médicos asocian a la puñalada que sufrió en 2018 durante la campaña electoral. De acuerdo con el parte médico, no se descarta una nueva intervención para tratar estas complicaciones.
Durante su recuperación, que podría extenderse por varios días, el exmandatario permanece bajo custodia policial permanente, con restricciones al uso de dispositivos electrónicos y comunicación externa, conforme a la orden judicial vigente.