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Argentina vive un profundo luto tras la muerte del papa Francisco, quien antes de ser elegido sumo pontífice ejerció como arzobispo de Buenos Aires. El alcalde de la capital, Jorge Macri, expresó su pesar y recordó al papa como "un porteño que trascendió fronteras y llevó su mensaje de paz, justicia y humildad al mundo entero".
En sus redes sociales, Macri calificó el momento como "de infinita tristeza" no solo para los católicos, sino para toda la humanidad.
Poco antes, el portavoz presidencial, Manuel Adorni, había anunciado que el Gobierno Nacional decretará siete días de duelo en homenaje al pontífice argentino.
Por su parte, el presidente Javier Milei dedicó un mensaje en la red social X, destacando que, pese a las diferencias pasadas, conocer la bondad y sabiduría del papa fue "un verdadero honor". "Como presidente, como argentino y como hombre de fe, despido al Santo Padre y acompaño a todos los que hoy sufren esta pérdida", expresó el mandatario.
La Casa Rosada también emitió un comunicado oficial en el que lamentó profundamente la partida de Jorge Mario Bergoglio, primer argentino en dirigir la Iglesia Católica. "La República Argentina, país de larga tradición católica, despide con pesar a Su Santidad y envía sus condolencias a la familia Bergoglio y a todos los fieles", señala el texto.
El comunicado resalta además la labor de Francisco en favor de la defensa de la vida desde la concepción, el diálogo interreligioso y la promoción de una vida espiritual especialmente entre los jóvenes. También se destacó su impulso por llevar austeridad y cercanía pastoral al Vaticano.
El mensaje concluyó con una despedida en latín: "Que la luz perpetua brille para él" y "descanse en paz".