El paro cívico convocado por la Comisión de Seguimiento a las Obras y Organizaciones Comunitarias de Sabana Grande de Boyá se cumple este miércoles con más de un 98 % de acatamiento, según reportes locales.
Las actividades comerciales, educativas y de transporte permanecen suspendidas en todo el municipio. Desde tempranas horas, las calles lucen vacías, los comercios cerrados y el flujo vehicular es prácticamente nulo, a excepción de unidades de emergencia y patrullas de la Policía Nacional, que se mantienen desplegadas para preservar el orden público.
La jornada de protesta, que inició a las 6:00 de la mañana y se extenderá hasta las 6:00 de la tarde, fue convocada en reclamo por la terminación de varias obras paralizadas desde el año 2022, entre ellas las carreteras Sabana–Las Taranas y Sabana Batey-Enriquillo hasta la Autovía del Nordeste, así como aceras, contenes, agua potable, el cese de los apagones y otras infraestructuras prometidas por el gobierno central.
“El pueblo ha hablado con contundencia. Hoy Sabana Grande de Boyá está totalmente paralizada en una muestra de unidad y dignidad frente al incumplimiento del Estado”, expresó uno de los voceros del movimiento organizador.
Durante la jornada, la Policía Nacional confirmó la presencia de más de 180 agentes y la detención de dos personas por supuestamente incendiar neumáticos en una de las vías principales del municipio. A pesar de este incidente, no se han reportado mayores alteraciones del orden.
Organizadores del paro y representantes de las iglesias locales se han mantenido vigilantes para garantizar que la protesta se desarrolle de manera pacífica y sin confrontaciones.
La Comisión convocante reiteró su llamado al gobierno para que retome el diálogo con las comunidades afectadas y presente un cronograma claro y verificable para la ejecución de las obras reclamadas.