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El alcalde Raymundo Ortiz valoró la conclusión de los trabajos del drenaje pluvial en la antigua calle 20 (antes Salvador Reyes), ejecutados por el Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (INAPA) con una inversión superior a los 100 millones de pesos, obra que calificó como una solución esperada por más de tres décadas.
Durante el acto inaugural, celebrado este viernes y transmitido en vivo por el programa El Mañanero por La Bakana 105.7 FM, Ortiz destacó que la zona era históricamente intransitable durante las lluvias.
“Esto que hoy estamos inaugurando, donde estamos, no se podía transitar. Caían dos gotas de agua y esta calle había que evadirla; tenías que irte por cualquier otra”, recordó el alcalde.
El edil agradeció al presidente Luis Abinader y al director del INAPA, Wellington Arnaud, “por el coraje, la valentía y la determinación” para ejecutar una obra que calificó de fundamental para el bienestar de la ciudad.
Ortiz señaló que, tras un año de trabajos, la intervención en la calle 20 incluye drenaje pluvial, imbornales, aceras y contenes, y representa una mejora sustancial en la infraestructura urbana de San Pedro de Macorís.
El alcalde explicó que el cabildo acompañó al INAPA en el proceso de planificación y ejecución del proyecto, y resaltó la relevancia de la vía.
Agregó que el ayuntamiento continuará con la pavimentación de calles, construcción de aceras y contenes, y la canalización de aguas hacia la calle 20 para que desemboquen en el río Higuamo.
Ortiz exhortó a los munícipes a cuidar la infraestructura y evitar lanzar basura que obstruya el sistema pluvial.
“Hay que crear conciencia y sensibilidad en los ciudadanos; de nada sirve la inversión si permitimos que los desechos tapen los imbornales”, expresó.
Indicó que el ayuntamiento desarrolla una campaña educativa en escuelas sobre el manejo de residuos sólidos, inspirada en iniciativas similares a las impulsadas por la alcaldesa del Distrito Nacional, Carolina Mejía, con el fin de promover una ciudad más limpia y sostenible.
Finalmente, el alcalde subrayó la relevancia social de esta obra. “Ningún gobierno había querido invertir en esto, porque lo que se entierra bajo tierra no se ve, pero es precisamente lo que garantiza el bienestar de la gente”, concluyó.