
Autoridades locales, legisladores y representantes del sector empresarial y social advirtieron que la separación administrativa entre Verón-Punta Cana e Higüey podría tener un impacto negativo en el desarrollo de toda la provincia La Altagracia, si no se garantiza una distribución equitativa de los recursos.
Durante una vista pública organizada por la Comisión de Asuntos Municipales del Senado en Higüey, se debatió el proyecto de ley que busca convertir a Verón-Punta Cana en municipio. Aunque hubo consenso en apoyar la municipalización, también se planteó la necesidad de mantener un acuerdo de mancomunidad con Higüey y de establecer mecanismos que aseguren la sostenibilidad financiera de ambos territorios.
La alcaldesa Karina Aristy señaló que de aprobarse la ley como está, Higüey podría perder hasta un 40 % de su presupuesto, lo que afectaría sus servicios e infraestructura. “Higüey no puede convertirse en la ciudad dormitorio de Verón”, expresó.
Otros actores, como monseñor Jesús Castro Marte y el diputado Francisco Villegas, insistieron en que debe mantenerse un modelo de cooperación permanente entre ambas demarcaciones. Empresarios y líderes comunitarios también reclamaron que los recursos se distribuyan “mitad y mitad” y que se reconozca el aporte económico de la provincia.
El proyecto legislativo 00112-2024 seguirá siendo estudiado en el Senado, mientras diversos sectores de La Altagracia exigen que se legisle con una visión integral del desarrollo regional.