El suministro nacional de carne de cerdo no se verá afectado por los recientes brotes de Peste Porcina Africana (PPA) detectados en las provincias de Dajabón y Espaillat, aseguró Luis Brache, presidente de la Asociación Dominicana de Granjas Porcinas (Adogranja).
Brache indicó que el consumo local está garantizado gracias a la combinación de producción nacional e importación. Actualmente, se producen alrededor de 10 millones de kilos mensuales y se importan unos 8.5 millones, lo que cubre el total de 18 millones de kilos que demanda el país.
El dirigente gremial detalló que el 90 % de la carne importada proviene de Estados Unidos, seguido por Brasil y Argentina. Además, sostuvo que el precio de la carne se mantendrá estable, debido a la capacidad del Gobierno de ajustar el mercado mediante importaciones si es necesario.
Sobre los brotes actuales, Brache explicó que se han presentado en granjas pequeñas, con pocos cerdos y sin controles de bioseguridad, por lo que su impacto en la producción a gran escala ha sido mínimo.
Aunque la peste aún no ha sido erradicada, el Ministerio de Agricultura mantiene el control sobre la enfermedad y reporta solo pequeños focos dispersos en el país. Desde 2021, cuando se detectó el primer caso, se han sacrificado miles de cerdos y la producción nacional disminuyó en un 50 %.
Para contener la propagación, Brache afirmó que el Gobierno presentó recientemente un plan que contempla establecer puntos de control para verificar el estado sanitario de los cerdos que se transportan, aunque dicho plan aún no ha sido implementado por completo.
La Dirección General de Ganadería (DIGEGA) explicó que la PPA es una enfermedad viral altamente contagiosa, exclusiva de los cerdos, pero sin riesgo para la salud humana. Se transmite por contacto directo o a través de objetos contaminados, y su propagación se agrava cuando los animales son alimentados con sobras sin tratar o productos derivados de cerdos infectados.