
Este domingo fue sepultado en el cementerio Cristo Salvador el documentalista dominicano que dedicó su labor a rescatar los detalles de la historia dominicana a través de sus audiovisuales audiovisuales como un legado para afianzar la identidad dominicana.
El féretro del artista fílmico que falleció la noche del viernes a los 67 años de edad, fue acompañado por quienes reconocieron en él a un defensor de la identidad nacional y la memoria histórica. Su obra, profundamente ligada a los conflictos sociales y los acontecimientos históricos del país, lo consolidó como un abanderado de la dominicanidad y un narrador visual de la verdad nacional.
Según una crónica de Listín Diario, el vínculo de Fortunato con el cine comenzó temprano. A los 17 años, ingresó a la Productora Fílmica Dominicana y apenas tres años después ya dirigía el departamento de Sonido. En 1985 se graduó de Comunicación Social en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), y desde entonces también se destacó como crítico de cine en medios escritos, radiales y televisivos.
Durante su carrera, René Fortunato dirigió diez largometrajes documentales, entre ellos títulos fundamentales como La Trinchera del Honor (1988), El Poder del Jefe (1991, y sus dos secuelas), La Herencia del Tirano (1998), La Violencia del Poder (2003), Caamaño: Militar a Guerrillero (2023), El Laberinto de la Injusticia (2024), y El Triunfo de la Democracia (2025), su última producción, estrenada hace apenas unas semanas en el Teatro Nacional.
El Triunfo de la Democracia documenta el ascenso del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) al poder en 1978, con especial énfasis en la figura de José Francisco Peña Gómez y la campaña racista que enfrentó.
Otra de sus obras destacadas fue Bosch: Presidente en la frontera imperial, donde retrató los siete meses de gobierno de Juan Bosch en 1963. Este documental lo hizo acreedor de múltiples reconocimientos, como el Premio ACE al Mejor Documental Hispanoamericano (Nueva York, 2009), el Remi de Plata en Houston y dos premios Casandra, entre otros.
En 2009 fue reconocido como Personalidad Cultural Dominicana por el Ministerio de Cultura, en honor a sus aportes al cine y a la cultura nacional.