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Un juez de Nueva York desestimó este miércoles la tercera solicitud de libertad bajo fianza del rapero Sean Combs (Diddy), quien se encuentra en prisión desde que fue acusado de tráfico sexual el pasado septiembre, al considerarlo un riesgo para la seguridad pública.
«El tribunal cree que el gobierno ha mostrado con pruebas claras y convincentes que no hay una condición o combinación de condiciones que garanticen razonablemente la seguridad de la comunidad», dijo el juez Arun Subramanian en su fallo, publicado hoy en la plataforma judicial digital.
El juez señala que el artista enfrenta acusaciones de «delitos graves y violentos» y podría manipular a testigos. Además, considera demostrado que ha «violado las regulaciones» carcelarias para ocultar sus comunicaciones con terceros, como denunciaron las autoridades.
La defensa de Diddy, quien se encuentra en una prisión de Brooklyn a la espera de juicio en mayo de 2025, propuso el viernes una fianza de 50 millones de dólares y su reclusión en una casa de Manhattan sin acceso a teléfono ni internet, bajo vigilancia y con restricciones sobre con quién puede comunicarse.
La Fiscalía, como en ocasiones anteriores, argumentó en contra de la liberación del artista por el riesgo de que manipule a testigos o víctimas, y denunció que ha estado comunicándose con el exterior desde prisión de manera no autorizada, lo que consideran obstrucción de la justicia.
El juez, que no emitió un fallo el viernes porque quería que ambas partes le proporcionaran información sobre esas comunicaciones desde la cárcel, no mencionó el «contenido» de las mismas, sino la «intención de eludir las normas» penitenciarias para dificultar su monitoreo.
Tras varios registros en sus mansiones, Diddy fue arrestado en Nueva York el pasado septiembre y acusado de conspirar para cometer crimen organizado, tráfico sexual y trata de personas, supuestamente desde 2008 hasta la actualidad, delitos que ha negado.
Otros dos jueces han rechazado la libertad bajo fianza del rapero, siendo la última decisión en septiembre, advirtiendo sobre la posible manipulación de testigos.